jueves, 29 de noviembre de 2012

Se siente tan irreal decir que los exámenes acaban mañana.
Se siente tan lejano aún esto de rozar la libertad con la punta de los dedos.

sábado, 24 de noviembre de 2012

Amores, tan extraños que te hacen cínica
te hacen sonreír entre lágrimas
cuántas páginas hipotéticas
para no escribir las auténticas
Cassandra Clare, amo tus libros, tus historias, tu forma de escribir y todo, pero tu escena con Magnus y Alec al final de "Cazadores de Sombras: Ciudad de las Almas Perdidas" acaba de matarme un poquito. ¿Cómo es que puedo amarte y odiarte al mismo tiempo?

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Y....sí, premio!

Ahh, Meli me va a matar!! (ok, técnicamente no, porque me adora, pero estará cerca), Me dio este premio hace eones alquimistas y yo todavía no lo contesto!! (más vale tarde que nunca, sweetie).

Veamos....he recibido ¡Un Liebster Award!

Todo cortesía de Meli de Interwined Hearts. Pasen por el blog y adoren a esta loca como lo hago yo (aunque obviamente no van a llegar a amarla tanto, jum! Y tengan cuidado con mi adorable peque o los hago papilla y los doy de comida a Godzilla).


¡Reglas!

- El que recibe el premio debe decir 11 cosas de sí mismo.
- El que recibe el premio debe responder 11 preguntas que hace quien lo ha nominado.
- El que recibe el premio debe crear 11 preguntas nuevas para que las respondan sus nominados.
- Los nominados deberán confirmar que han recibido la nominación.
- Los nominados no pueden repetirse, es decir, los nominados no podrán enviar de vuelta la nominación a quien los haya nominado anteriormente.
- Los nominados deben tener menos de 200 seguidores.

Akjadhaskjdhaskd, ni mi mamá pone tantas!!

Pero se lo debo a Meli así que aquí vamos:

11 cosas sobre mí (que probablemente no sabes ni te interesan pero lo siento, el premio y Meli mandan):

1. No me emborracho con facilidad. A veces mis amigos confunden el estado de excesiva energía que me nace cuando salimos a un lugar a tomar, y creen que estoy borracha al primer trago. Pero cuando a mitad de la madrugada creen que he tomado suficiente y empezaré a decir tonterías, sigo en pie y totalmente sobria. Al final, llevo años de experiencia sosteniendo cabezas mientras vomitan (créanme, se necesita experiencia para hacerlo bien, evitando ser salpicado), conduciéndolos a sus camas y arropándolos de forma que no puedan caerse y despertar besando el suelo.

2. Valeria no es mi nombre real (ya, ya, lo sospecharon desde un principio?). La verdad es que no oculto mi nombre para quien quiera saberlo, pero nunca lo pongo completo por razones de seguridad (si mi familia se entera que leo tanto, reseño novelas, mantengo actualizado un blog, escribo y pronto empezaré a publicar libros, pues....mejor no pensemos en eso). Por si se lo siguen preguntando, mi nombre "real" es Carmen. Muchas me siguen aquí por los foros y saben que no tengo problemas, incluso ayudo a Ed. Frutilla sin seudónimos. Pero cuando se trata de publicar, bueno, un seudónimo es una buena metáfora de: "es como si me transformara en otra persona". 

3. Tengo pesadillas desde los....no sé, ¿doce años? No recuerdo exactamente cuándo empezaron, tengo algunas sospechas de por qué, pero viví con ellas por mucho tiempo. Luego, me acostumbré e incluso llegué a ser capaz de distinguir que estaba en un sueño mientras sucedía. Son menos frecuentes y ahora solo tengo como una por semana. Sé que algún día tienen que desaparecer y, de todos modos, a veces me dan algo de inspiración para mis libros. 

4. Le tengo miedo a las fotos de animales que miran a la cámara. (¿Vieron que soy rara?) Todo empezó con una tarea de biología sobre no-sé-qué aspecto de los pumas o jaguares, no recuerdo bien. Entre las imágenes que encontré, hubo una que sé que fue protagonista de pesadillas como por un mes, aunque ahora sea incapaz de recordarla. Pero la sensación de los ojos de ese animal, mirando fijamente, como si dijera que pensaba matarme, no se me quita con nada. Eventualmente se expandió a otros animales y aún lo intento controlar. En el puesto nº 01 siguen estando los felinos (con excepción de los gatos en el 95% de las veces - ¡larga vida a los gatos! Amo los gatos, soy una chica de gatos, Meli siempre me pasa gatitos lindos, así que bueno, los gatos suelen librarse de esto. Sí, ya sé, "un puma es un gato grande". NO-LO-ES-PARA-MÍ. Fin).

5. Me pinto las uñas todas las semanas de un color diferente. A veces voy por una manicure pero aprendí a hacerlo sola  un verano, así que me ahorro dinero y salir de mi cama. Me gustan los colores locos, divertidos y originales. Color, mucho color, aunque tengo púrpuras y negros, también. Me las pinto enteras, mitad de un color y mitad de otro, en fin....

6. No me haría un tatuaje, probablemente sufra al teñirme el cabello y definitivamente el maquillaje es solo para ocasiones especiales, eventos importantes y días en los que excedo las 40 horas sin dormir (todavía no estoy lista para formar parte del casting de The walking dead). 

7. No fumo. Le tengo akdjsakldjhslakdja al cigarro. Cuando me paro cerca de alguien que fuma, los ojos me lagrimean, la garganta se me cierra, empiezo a toser como loca y ¡paf! me pongo al borde de un ataque de asma (no es broma, tengo asma). O bueno, eso pasaba hace cuatro años. En la universidad incluso tuve una época en la que podía distinguir la marca de cigarros por el olor (antes de que prohibieran fumar en el campus). Incluso así, sigo resistiéndome y nunca he fumado un cigarro en mi vida. 

8. Me vuelvo adicta con facilidad. Hasta ahora mis adicciones más saltantes están en leer (desde que empecé a los 8 años no paré de sumar libros), escribir (llevo unos veinte libros  empezados; de los cuales al menos 7 sobrepasan las cien hojas y uno está terminado), el chocolate (como una barra diaria, aproximadamente), y mil cosas más que deben quedar en el teclado antes de que mi adicción a escribir se manifieste.

9. Me gusta leer biografías y datos curiosos de gente famosa. Siempre que veo una película y me gusta un nuevo actor, me meto a google y me entero de toda su vida. Desde cuál era su comida favorita hasta en qué cementerio está enterrado. Ahh, ahí tienen, también soy adicta a los "quotes".

10. Odio las inyecciones. Aclaremos: No me dan miedo las agujas ni la sangre (efectos secundarios de tener una madre médico y un padre enfermero), soporto con tranquilidad una intravenosa (después de tantos ataques de asma dejan de importar), las vacunas, etc, etc. Pero traten de ponerme una en el trasero y juro que batiré el récord mundial para huir de eso. Tal vez tenga que ver con un cumpleaños en que me dio neumonía y me colocaron como cuatro ampollas en el transcurso del día pero NO-LAS-SOPORTO. 

11. Siempre soy la más pequeña de las clase. Dejando de lado mi tamaño (uno sesenta y casi-nada), yo entré al colegio muy chiquita. MUY chiquita. Como en: todos tenían seis años y yo, cuatro. Ahora, a un año de acabar la universidad, todos mis amigos tienen veinte o veintiuno y yo acabo de cumplir los 19. Aunque este detalle me jodió la vida cuando estaba en secundaria, desde la universidad tengo un creciente orgullo por ser tan joven y poder estar donde estoy. 

Ahh, carajo! Eso de decir 11 cosas ha sido JODIDAMENTE difícil (en serio he demorado unos tres días). 
Eeeen fin. 

Ahora debo contestar las preguntas de Meli. 

1-) ¿Te bañas a menudo?
Algo así. Me baño todos los días, excepto los fines de semana que no salgo (lo cual es raro) y cuando el clima está debajo de los doce grados.

2-) ¿Sabías que si te despiertas entre las 2:00 y las 3:00 de la mañana sin ninguna razón, es porque alguien te estaba viendo?
Sip, me dijeron hace meses. Y dormir bien no es una de mis habilidades así que de todos modos no importa mucho. 

3-) ¿Sabías que el día que respondas esto no vas a poder dormir bien porque acabas de enterarte de mí dato curioso xD?
Jajajaj, sí.

4-) En hombres, prefieres: ¿pelo largo o corto?
Pelo corto se les ve mejor a muchos pero el pelo largo permite pasar tus dedos por él y disfrutar la sensación. 

5-) ¿Ojos verdes o azules?
DEFINITIVAMENTE ojos verdes. 

6-) ¿Bob esponja o Patricio Estrella? (xD)
Diaaaabloooss! Patricio. Es bobo pero tierno y quéséyo, VIVE BAJO UNA ROCA!! Í-d-o-l-o.
Además...



7-) Di 3 malas palabras a la cuenta de 1… 2… 3: ¡YA! (Eso no era una pregunta O.o ups xD)
Mierda, jódete, la putamadre, conchetumadre, hijo de puta, zorra, perra, cojudo de mierda, carajo, cara de culo, idiota, imbécil, lameculos, estúpido, malparido, huevón, pendejo, puta, cabrón....y mi madre me habló por msn y me sentí observada.

8-) ¿Un libro que te haya hecho llorar sin parar?
Ninguno. Me han emocionado muchos pero con ninguno realmente lloré. Aunque, por supuesto,"Nuestra Señora de París" me sacó una lágrima.

9-) ¿El libro más empalagoso que hayas leído?
Mmmm, Fifty Shades of Grey. Sí, sí, WTF? Lo siento, cuando llegué como a la mitad, era taaan ajdkakdjsahld su amor, admiración, deseo por el tipo que por mucho (buen) sexo que tuvieran, lo puse a un lado por peligro de diabetes (¡Viva Ward! Vishous es el dios del BDSM!) 

10-)¿La cosa más fea que te haya pasado?
La secundaria.

11-)¿Por qué le pusiste a tu blog de esa manera?
¿En serio? (estaba segura de que era obvio). 

Mis preguntas:

1. ¿Círculos o cuadrados?
2. ¿Cuál es tu color favorito?
3. ¿Crees en la magia?
4. ¿Qué libro de tu infancia recuerdas?
5. ¿Sabes quién es Germán Garmendia? (forma sutil de hacer que conozcan a este loco y divertido genio)
6. ¿Qué animal te da miedo?
7. ¿Algún actor/actriz que te encante?
8. ¿Tienes una fobia?
9. ¿Alguna frase/cita que te guste mucho?
10. ¿A qué eres adicto?
11. ¿Un libro cuya portada te atrajo y resultó ser decepcionante?

Nominados:

1. Clyo de Contradíceme o muere
2. Belle de Gritos al aire
3. Laura de El Beso Carmesí
4. A M.m.F de Fragil Dreams
5.  A Die de In a Fairy Tale
6. RBC de RBC in the Wonderland Designs

Y...todos los blog que quería nominar ya los nominó Meli o tienen más de 200 seguidores (una tenía 209 y quise hacer trampa pero las reglas son las reglas).

Saludos!

sábado, 17 de noviembre de 2012

La fortaleza


A veces te cuelas por los resquicios de mi alma,
Pero no importa.
A veces, sin darte cuenta, burlas todas las barreras,
Pero no haces nada.
A veces, te daría todo,
Pero no pides nada.


La guardia entera corría. Decenas de guerreros entrenados solo para proteger aquel lugar. Habían recibido mil asaltos, cientos de emboscadas, decenas de intentos de expugnar aquella fortaleza. Pero nada había conseguido abrirse paso. Ni siquiera aquellos que pidieron permiso para visitarla. Cuando lo solicitaban, les había sido concedido, pero solo para ciertos niveles. Conforme avanzaban revelando nuevas habitaciones, desconocidas incluso para los guardias, todos esperaban que llegara la autorización para que el visitante pasara al siguiente nivel, uno que lo acercara más al recinto central. No obstante, siempre se quedaban lejos.
En cierta forma, a veces, rezaban por ello. Porque entonces el visitante se llevaría el tesoro que custodiaban y serían libres. Y, aún más importante que eso, el tesoro podría ser admirado y valorado por alguien más. Es muy aburrido conservar algo valioso y que nunca nadie sea capaz de apreciarlo. El tesoro, si tenían suerte, sería llevado junto a otro y sus dueños podrían vivir en paz por siempre con aquella fortuna. Pero el momento nunca llegaba y debían escoltar fuera al visitante. Incluso aunque se descubrieran extrañando su presencia que mitigaba un poco la soledad de la fortaleza, lo sacaban. A veces con palabras amables, a veces amenazándolo, incluso burlándose de él.

Sin embargo, allí estaba. Alguien lo había oído en la sala principal. La alerta había saltado mostrando su rostro a cada uno de ellos.

Desesperados, los guardias corrían sin coordinación. Gotas de sudor se deslizaban sin cuidado hacia el suelo, salpicando las paredes de los corredores. Iba a ser robado, estaban seguros. Su vida no sería la misma y pasarían siglos intentando recuperarlo. Pero podía ser peor. ¿Qué pasaba si quemaban el tesoro? ¿Y si lo destruían hasta fragmentos tan pequeños que nunca serían capaces de volverlos a juntar?
Allí estaba otra vez, el rostro del intruso.

¿Cómo había sucedido? Algunos lo vieron pedir su ingreso una vez, pero dijeron que se retiró rápidamente y finalmente dijo que era mentira, un simple impulso del momento, de la curiosidad surgida al avistar la fortaleza desde lejos. Lo habían visto merodear con cuidado, como tantos otros se acercaban a veces, pero parecía inofensivo.

La puerta del recinto estaba abierta y la visión hizo que más de uno se sintiera desfallecer.
Irrumpieron en olas sin control, con la respiración agitada y el corazón latiendo en los oídos.
Sin embargo, en las suaves lozas de mármol que decoraban en suelo, en la visión mística del lugar, en aquella habitación poderosa y frágil al mismo tiempo, se detuvieron como una sola persona.
Temerosos, buscaron con la mirada las consecuencias de su descuido. Buscaron las cenizas, los fragmentos destrozados, la ausencia del brillo, pero todo fue en vano.

Allí, en el espacio central, en aquel resquicio forrado con la suavidad de las nubes y recubierto con un vidrio fino como alas de mariposa, seguía el tesoro. Sentado frente a él, estaba el intruso. Se sentaba con las piernas cruzadas, los cabellos alborotados y la mirada brillante. Al verlos llegar, sonrió sin desviar sus ojos del tesoro.

Uno de los guardias se adelantó. Su primer paso resonó con un eco suave, como un susurro.

Usted no puede estar aquí. Debe irse.

El intruso contestó:

Ya lo sé.

Se puso de pie y, con una última mirada al tesoro, emprendió su camino de vuelta.
En medio de parpadeos de confusión y murmullos extrañados, los guardias lo escoltaron hasta la salida.
En cuanto dejó la fortaleza, un suspiro escapó de todos ellos. Sin embargo, el mismo guardia que se había adelantado la primera vez, lo detuvo.

¿Por qué no lo tocó? ¿Por qué no lo robó? ¿Por qué no lo destrozó?

El intruso sonrió.

Una vez, tuve una fortaleza, también. No tan impresionante como esta, pero era mía. Encontraron mi tesoro y fui feliz. Creí que duraría por siempre, como dicen que los mejores tesoros hacen cuando se unen. Pero lo destrozaron. Ahora siento que solo lo despilfarré. No puedo volver a unir un tesoro y mis guardias ya no son los mismos de antes. Solo imaginen lo que sería cuidar algo con tanto esmero, ver cómo llega a su destino y luego darse cuenta de que en realidad todo fue por nada.

El guardia tragó saliva y sintió un escalofrío recorrerle la columna. No quería que eso pasara con su tesoro. El intruso continuó:

No tengo derecho a tocar lo que ustedes conservan, solo tenía curiosidad por lo que había dentro. Es una fortaleza impresionante y aunque no he visto muchos, creo que es un tesoro que vale la pena. Siento haberlos asustado. No lo he tocado, no quiero dañarlo.

Gracias.

No hay nada que agradecer. ¿Sabe? Es curioso cómo un tesoro tan frágil tiene una fortaleza que hace pensar en cavernas oscuras y tumbas abiertas.

El guardia sonrió.

No pensamos así. Usted no puede verlo, pero hay una belleza extraña en cómo luce nuestra fortaleza. Y la amamos así.

El intruso asintió, pensativo.

Sí, creo que puedo entenderlo. Ha sido corto el tiempo que pude ver el interior pero fue hermoso. Ahora debo irme.

Les dio la espalda y empezó a alejarse. Sin embargo, el guardia no podía dejarlo ir. El intruso había logrado entrar a la fortaleza sin que ellos no notaran, había visto el tesoro y lo protegió como si fuera uno de ellos. ¿Su deber como guardia acababa cuando alguien veía el tesoro o cuando se lo llevaba? ¿No era todo sobre que alguien más lograba apreciar su belleza? ¿Sería igual si después de un tiempo alguien más conseguía llegar al recinto principal? Así que lo detuvo una vez más:


Espere, ¿no desea quedarse? Puede revisar las habitaciones, tal vez encuentre algo de valor, podría quedárselo y volver a juntar su tesoro. Las cosas de algunas habitaciones de la fortaleza son libres, no nos pertenecen y no tenemos órdenes de resguardarlas. Muchas han sido dejadas aquí por otras personas, y son suyas si las quiere.

El intruso sonrió. 

Lo siento, no puedo. Mi tesoro fue destrozado una vez, incluso reconstruirlo no ayudará a que todo vuelva a ser como antes. 

¿Entonces por qué lo intenta?

No lo intento. Solo espero que todo termine, que vaya al lugar donde los tesoros no existen. Hace tiempo que dejé de intentarlo. Nunca va a volver. 

El guardia insistió: 

No puede saberlo. Tal vez...

Pero el intruso negó con la cabeza y la rabia brilló en sus pupilas. 

He dicho que no.

El guardia retrocedió.

Entonces sepa que no puede volver a entrar aquí, nunca más, ni comentar con nadie lo que ha visto. O lo mataremos. 

El intruso asintió y empezó a caminar en dirección al camino que lo sacaría de allí. A pasos lentos y moribundos, pero sin volver la vista atrás. 

Y así, la espera de los guardias continuó. 
Valeria E. Garbo
17 de Noviembre

sábado, 10 de noviembre de 2012

Sin historial-Lissa D'Angelo

Acabo de terminar el libro hace unos...¿cinco minutos?

Dejando de lado el hecho de que voy a reseñarlo, y la sensación de: "JODER, NO PUEDE ACABAR AQUÍ", hay dos fragmentos (no son los más importantes, ni los mejores pero....a quién le importa).


—Quiero que me necesites —murmura, luego se inclina hacia mí, sus labios rozan suavemente mi oído—, quiero que digas "te extraño" aunque hayamos pasado todo el día juntos.



—No hagas eso, no nos hagas esto —su dedo continúa bajando y se entretiene un buen rato en mi cuello—. No racionalices todo, no busques excusas para no creer en lo que está pasando entre nosotros.



lunes, 5 de noviembre de 2012

Yo me pregunto hasta cuándo seguiremos con esta pretensión de que nada ocurre y de que todo sigue su curso.
Admitámoslo, me gustas, creo que yo también te gusto. No he podido quedar más marcada por otra persona.
Pero eso no importa, eso no importa porque yo no sé nada de nada. Porque no tengo certeza de nada.
Lo único que sé es que quiero un beso, quiero verle, quiero saber qué demonios es esto  y por qué reacciono de esa estúpida manera ante su presencia.
Y la vocecita dentro de mi dice que olvidemos todo, que tendremos que esperar mucho más por esa respuesta.
Y la vocecita dentro de mi dice que esperemos, que aguantemos un poco más.
Y yo digo que me esta empezando a doler un poco la incertidumbre y el silencio.
Y yo digo que esta cosa, esto que quiere llamarse querer, esta creciendo más de lo que planeé y esta haciéndose más fuerte de lo que esperé.
Y yo digo, por favor, dime algo.

Belle de la Croix

domingo, 4 de noviembre de 2012

Ella: ¿Hola?....¿Aló?.....Oiga, si no dice nada, cuelgo en cinco segundos. Cinco...cuatro...tres...dos...
Él: Hola, ratona.......................................Di algo, por favor.
Ella: Hola. 
Él: ¿Cómo estás?
Ella: En shock. No, espera, no sé. ¿Eres tú?
Él: Eso creo.
Ella: Me has dicho ratona. Eres tú. 
Él: *Se ríe. Justo como recordaba. Grave, ronco, suave* Creí que era el número de tu padre. Hace un minuto cobré el valor para marcar. El tuyo desapareció desde octubre del 2007.
Ella: Me robaron el celular en mi cumpleaños, y mi papá me dio el suyo antes de ir a la universidad.
Él: No sabía. Cuando contestaste iba a colgar. Pero hiciste la cuenta regresiva y te reconocí. 
Ella: Bien. 
Él: Sí. 
Ella: Entonces...tengo curiosidad.
Él: Creo que naciste así, ratona.
Ella: No me digas así. Ya tengo 19 años.
Él: Lo siento.
Ella: Ya.
Él: Lo siento mucho. Por todo. También no haberte llamado por tu cumpleaños. 
Ella: No importa.
Él: Sí importa. Me importa mucho. Amas tus cumpleaños. Y lo siento muchísimo, ratona.
Ella: Ya estoy grande para que me digas así. En serio, crecí.
Él: Siempre serás mi ratona.
Ella: No digas eso. 
Él: Lo siento, hablaba en pasado
Ella: No es cierto. Dijiste "siempre serás".
Él: Entonces hablaba en sueños. Siempre fui un soñador y un sonámbulo. 
Ella: Sí.
Él: Pero eso ayudaba, ¿cierto?
Ella: A veces.
Él: Dime que no sigues haciendo lo que te dije.
Ella: ¿Por qué no lo haría? Funciona. Y gracias, creo que nunca te dije gracias. 
Él: No es eso...era una forma sutil de preguntar si aún las tenías.
Ella: Nunca se van. Ahora me dejan por días, semanas incluso. Pero regresan, como siempre.
Él: Son solo malos recuerdos, ratona. Todas ellas. 
Ella: Pero es mi pasado. Sabes que siempre estoy orgullosa de mi pasado porque...
Él: Porque si no, tal vez ahora no serías la misma. Lo sé. 
Ella: Siempre sabes. 
Él: Te he extrañado. Te extraño. Todo nos salió mal, ¿no?
Ella: Sí, mucho.
Él: Si las cosas hubieran sucedido de otro modo...odio el pasado.
Ella: ¿Ves? Allí ya no hablas en pasado. Es presente y es un condicional.
Él: Y también una lástima.
Ella: ¿Por qué ahora?
Él: No sé, porque cobré valor. Pensaba en la luna, pensaba en la portada del libro, pensaba en ti.
Ella: Ahh, vale.
Él: ¿Ratona?
Ella: ¿Sí?
Él: ¿Hay alguien?
Ella: ....no.
Él: Has dudado. 
Ella: Y te he dicho que no. 
*Silencio. Uno largo.*
Él: Debo irme, para no perder la costumbre. 
Ella: Yo me fui, también.
Él: Pero nunca me rompiste el corazón al hacerlo.
Ella: Mi corazón no se rompe. Está hecho de polvo de estrellas.
Él: ¿Aún recuerdas eso?
Ella: Sí. 
Él: Gracias. En serio. Te quiero, ratona. Sabes que te quiero.
Ella: Sí. 
Él: ¿Algún día?
Ella: Tal vez. Nunca digas nunca. 
Él: Nunca dejaré de llamarte ratona *Risa. Otra vez. Especial*
Ella: Entonces tengo esperanzas. Y ahora también tengo tu número.
Él: Este no es mi número.
Ella: Bien. Tienes el mío. Solo tengo que esperar.
Él: Tranquila. Tu corazón está hecho de polvo de estrellas. A las estrellas se les piden deseos. 
Ella: ¿Y a quién le piden deseos las estrellas?
Él: A las chicas a las que muero por besar y susurrarles un apodo al oído. 
Ella: ¿De verdad?
Él: Sí, ratona. 

jueves, 1 de noviembre de 2012

Camino a la fama-Dana Luz


Argumento: 

Cuando dos de los mejores escritores se unen para crear el bestseller que los impulsará a la fama infinita, sólo pueden pasar dos cosas: o todo sale a pedir de boca .. o sus vidas se convierten en un torbellino de emociones (entre las cuales, definitivamente no se encuentran "atracción" y "romance").

Claire Manfory es la creadora de la más maldita de las mujeres que algún lector haya podido encontrar.

Derekpor el contrario, creó al personaje mas heroico, sexy y soltero del mundo.

¿Qué pasaría si, por alguna razón, estos increíbles personajes ficticios tuvieran que participar en una misma novela? Y ¿qué pasaría si .. sus creadores tuviesen que soportar el hecho de escribir juntos?


Opinión/crítica/reseña:
Voy a contarles algo sobre esta novela. Yo venía muy ilusionada. La empecé hace siglos, cuando El Criticón llenaba mis días con una sonrisa. Leí de un tirón los ¿seis? capítulos que iban publicados y me volví adicta a revisar de vez en cuando si había algo nuevo. Pasó mucho tiempo antes de que volviera a oír de la autora en un foro y me reencontrara con la historia. Pero aunque ella publicara un capítulo casi todas las semanas, notara los entusiasmados comentarios y muriera por unirme, decidí esperar. Sospechaba que vivir en zozobra semanal por un capítulo de un libro como este no ayudaría en nada a mi ansiedad. Así que esperé al minuto en que Ediciones Frutilla sacó el libro y pasé las siguientes horas devorándolo.
Ahora bien, vayamos del lado rosa y Hola-Dana-soy-tu-fan a la "intentemos que sea una crítica imparcial".

1. Personajes:

Claire Manfory: Divertida, loca, terca.
Derek Rhone: Seductor, impulsivo, esquizofrenizante.

Cuando soy capaz de recordar varios detalles sobre los personajes de un libro, señalar qué los hace diferentes, cautivadores y creíbles, es que el autor ha hecho algo bien. No son solo los protagonistas, sino el staff completo. Tienen deseos y metas, miedos y odios, manías y complejos. Y el choque de personalidades fue apasionante (punto para Dana). Aunque por supuesto también tenemos un poco de personajes malos-malos y buenos-buenos, como los editores.

La gente normal no secuestraba a sus colegas, la gente normal ciertamente no se planteaba amenazar a alguien y cinco minutos después arrinconarlo en la cocina. Derek necesitaba unas clases de gente normal y con urgencia. 

2. Estilo:
Una redacción genial (si no contamos los errores ortográficos que de todas formas son pocos). Se mantiene a lo largo de la historia, en los diálogos, en las situaciones, en las metáforas, en todo.

—Voy a morir —susurró aletargada, mientras hundía el rostro en la almohada y se dejaba embriagar por ese aroma tan particular. Qué extraño que su almohada oliera a hombre, teniendo en cuenta que su cama era como la superficie lunar, el último avistamiento masculino databa de mil novecientos sesenta. 

3. Ritmo

El ritmo va bien, mantiene cosas pasando en medio. A veces se notaban los huecos en el camino, donde uno se deslizaba sin ganas (aunque supongo que se necesitaba un respiro de vez en cuando). Fueron poquísimas ocasiones y pronto volvían las situaciones divertidas o que proporcionaban esos quiebres en la historia que me mantenían saltando de una línea a otra a una velocidad de vértigo.

4. Giros argumentales

Los giros son buenísimos, las situaciones ridículas, divertidas, dramáticas y culpables-de-aumento-de-latidos-del-corazón-por-minuto se suceden casi todo el tiempo

Claire iba a admitir que para ser un secuestro, el lugar estaba de muerte. Quizás y se dejaba secuestrar con más frecuencia. 

Aunque sí creo que algunas subtramas pudieron ser mejor aprovechadas (cómo Derek admite que él es el culpable del problema con el correo de Claire, por ejemplo, fue muy simple para mi gusto).

5. El final
Como el libro lo dice: "Tiene todo un señor epílogo". No creo que la historia mereciera un final con altas dosis de adrenalina ni de giros drásticos. Fue un final bastante tranquilo pero que se adapta a la historia y no la culpo por eso.

6. Portada
Una de mis favoritas de Ediciones Frutilla. La adoro. Los detalles están cuidados y le hacen justicia a los personajes.

7. Sinopsis
Bastante adecuada. Llama la atención, explica el libro sin exagerar nada y, por el contrario, le calza perfectamente.

Clasificación:

Clasificación A: Un 8.
Me gusta cómo escribes, Dana. Desde que te leí cuando eras más joven y aún no estabas con las frutillas. Tu estilo es dinámico y divertido, pero no por eso deja de tener toques profesionales. Y no niego que en las escenas en las que se hablaba de los libros de ambos (los fragmentos de los escritos de Claire y Derek) me llevé una grata sorpresa. Siento que podrías saltar entre géneros sin problema.

No sé cómo llegamos a ésta situación, de pie uno frente al otro, casi tocándonos pero sin llegar a romper la barrera de las distancias. Tus ojos transmiten un solo mensaje, el mismo que mis labios contienen firmemente dentro de mi garganta. Bésame, tócame, quiéreme, aíslate conmigo en esta íntima soledad. Dos es mejor que uno, dos significa juntos.
Distancia trémula, ínfima, me atrevo a doblegarte.
No me temas, no te alejes, deja que mis manos te consuelen, deja que mis labios te quiten esa indecisión. Mujer demoníaca  mujer que me roba el sentido comparte conmigo esos pecados tan bien callados, ábrete a mi inquisición.
Suave, suave suspiro de aceptación, eres mía por ahora.
Manos soy esclavo de sus acciones, hoy no me pertenecen, hoy yo les pertenezco.
Labios, beban y succionen, no se priven pues a través de ustedes vivo este momento.
Piel absorbe su calor, guárdalo todo para cuando ella se marche.
Y ojos no se atrevan a desplegarse, porque entonces sentiré que esto no ha sido más que un sueño.
Pero no, está y estamos; y al apartarme de tu lado veo tus párpados fuertemente apretados. Me permito saborear la idea, de que al igual que yo también temes despertar…


Clasificación B: Un 7,8.

Un argumento que atrapa a nivel general. Si bien los choques de personalidades que son obligadas a hacer algo juntos son algo común, el escenario que nos deja Dana es cautivador. Escritores.
¡Basta leer esa sinopsis! Siempre me dije que el nobel era apuntar bastante alto pero finalmente....a quién le importa.
Si algo me dejó un poco desanimada fue que a veces las pequeñas peleas y misterios son bastante previsibles (sí, ya sé que crear misterios estos días es cada vez más difícil). Al menos supiste cómo manejarlos con pistas falsas.

Clasificación C: 
Un libro para leer con calma y buenos ánimos. Es divertido, picante, sincero y relajante. Te asegura chillidos de emoción, risas, gruñidos de exasperación y ganas de estrangular un par de personajes. Un libro para poner de buen humor a cualquiera.

En conclusión: un excelente debut.

Dana, incluso antes de Ed. Frutilla creía que eras genial. Espero que sigas escribiendo, aunque no tengas apuestas a las que agarrarte.

Si esto fuese un libro, esta sería la escena en que la protagonista huye sin un destino aparente y descubre al final del corredor las escaleras, las toma pensando que son su última salvación. Y llegando al piso intermedio, tropieza con sus propios pies y termina con la cabeza rota contra el piso. El protagonista a quien todos odian por haberla llevado a esa situación, hace todo en su poder para salvarla y estando en el hospital esperando noticias, descubre que está perdidamente enamorado de ella. Le pide a Dios el milagro de que su amada despierte y por supuesto, esto ocurre. Se disculpa, le jura su vida y un poco más. Se casan y viven felices para siempre. ¡Mierda! ¿No son los libros algo hermoso? 

"Aún tienes a la peque Meli en tus manos."
Meli

No hay caso, esta chica desborda ternura. Se le derrama por los poros sin que pueda evitarlo. Por favor, alguien consiga que se quede por siempre.
"Esa es tu ventaja sobre cualquier otro idiota con el corazón roto. Tú puedes escribir sobre eso".
Harry Weir-Fields
Ruby, la chica de mis sueños.